lunes, septiembre 24, 2007

se constituye el nuevo directorio nacional de Anef

El pasado 10 de septiembre el Directorio Nacional de Anef concluyó, con el acuerdo unánime de los 23 directores, el proceso de constitución de sus cargos en el Ejecutivo. Así culmina el proceso de elecciones nacionales llevado adelante por la Anef y sus asociaciones afiliadas, el pasado 11 de julio.

El Directorio Nacional de Anef se conforma de 23 dirigentes, entre los que se deben constituir los 17 cargos del Ejecutivo. Este Ejecutivo está conformado por los cargos de Presidencia, Secretaría General y Secretaría de Finanzas, 8 Vicepresidencias con distintas responsabilidades políticas, 2 Vicepresidencias Técnicas y finalmente 4 Secretarías Técnicas.

Tal como informamos durante el proceso electoral, en esta última elección, se presentaron 4 candidatos socios de nuestra Aneiich. Los 4 resultaron electos, lo que constituye un importante respaldo y valoración de parte de los funcionarios públicos a sus trayectorias y capacidades dirigenciales. Pero es además una demostración del respeto que tiene nuestra organización en el conjunto de los funcionarios públicos.

Es así que, en el proceso de constitución, han asumido las siguientes responsabilidades dentro del Directorio Nacional:


  • Nury Benítes, quién fue electa con la segunda mayoría individual, asumirá por segundo período consecutivo la Primera Vicepresidencia de Relaciones Nacionales.

  • Ángela Rifo, quién fue electa con la tercera mayoría individual, asumirá la Tercera Vicepresidencia de Relaciones Internacionales.

  • Carlos Insunza, actual Secretario de Organización de Aneiich, quién fue electo con la quinta mayoría individual, asumirá la Cuarta Vicepresidencia de Organización.

  • Patricia Velásquez, actual Presidenta de Aneiich, asumirá la Secretaría Técnica de Solidaridad y Conflictos.
En el sitio de la Anef, se puede revisar el Acta de Constitución de Directorio y el Acta Final de la Comisión Electoral.

sábado, septiembre 01, 2007

29 de agosto : la unidad de los trabajadores es invencible


El recién pasado miércoles 29 de Agosto, la Central Unitaria de Trabajadores convocó a una "Jornada Nacional de Movilización y Acción Sindical" bajo la consigna "¡NO AL NEOLIBERALISMO! A Conquistar un Estado Social, Democrático y Solidario". Fue, sin duda, una masiva jornada de movilización de los trabajadores y trabajadoras a nivel nacional, tal como da cuenta el informe de la CUT sobre las innumerables iniciativas que se realizaron a lo largo del país. Fue también una jornada limpia, ya que todos quienes estuvimos en los puntos citados por la CUT fuimos testigos de que los actos de violencia que se produjeron en la jornada corrieron por cuenta de quienes ordenaron reprimir la movilización.

La jornada del 29 de Agosto ha puesto en el centro del acontecer nacional a los trabajadores y trabajadoras, sus organizaciones y sus demandas, y es un paso más del largo proceso de reconstrucción del movimiento sindical de los últimos dos años. Las movilizaciones de los trabajadores forestales, de los subcontratados de Codelco, las de la Anef y en los últimos días las de los trabajadores de Agrosuper, han sido las luchas más emblemáticas de este período.

Se vislumbra, en estos procesos, el surgimiento de un Sindicalismo de Nuevo Tipo, que desde sus raíces históricas de unidad, solidaridad y con una visión político-sindical capaz de enfrentar los desafíos actuales, se ha propuesto romper el inmovilismo en que se ha mantenido a la sociedad chilena durante los gobiernos democráticos.

Es por ello que resulta casi ridículo oir a los voceros del gobierno declarar que se trató de "un día normal", o que "nada ha mejorado en Chile después del 29 de Agosto". O leer en los medios de comunicación del empresariado, las más diversas acusaciones sobre la "ilegalidad" o el "casi terrorismo" de la convocatoria de la CUT. Ambas, son formas de evitar la discusión de fondo que ha planteado la central.

La movilización del 29 de Agosto ha puesto en el centro del debate la necesidad de terminar con la escandalosa inequidad que se ha mantenido y profundizado durante los últimos 17 años en nuestro país, a pesar de los avances en diversas políticas sociales. Para ello, no es suficiente el realizar ajustes menores o maquillaje en ámbitos de primera relevancia como el Sistema Previsional o el Sistema Educacional. Se requieren reformas profundas que pongan en el centro las necesidades de las mayorías, y no las utilidades de quienes hacen negocios a costa de nuestros derechos.

A eso se refiere el Movimiento Sindical cuando llama a poner fin al Neoliberalismo: a transformar al Estado, al gobierno y al parlamento, a la política económica y la legislación laboral, para que dejen de ser los guardianes de las millonarias utilidades de los pocos que se benefician con el modelo económico en que vivimos, y pasen a poner en el centro de su accionar a los millones de chilenos y chilenas que vivimos de nuestro trabajo.

Este 29 de Agosto, hemos abierto un camino y dado un primer paso en esta dirección.